Siria vuelve a ser el centro de atención en Medio Oriente
Desde que comenzaron las revueltas en Siria ya hace 8 años, Bashar El-Assad pasó por el temor de perder el poder, temor que transmitió a diversos países del Medio Oriente, los cuales para no verse involucrados tomaron la decisión de darle la espalda, congelar su membresía dentro de La Liga Árabe, y reducirle el nivel de relaciones diplomáticas dejando al líder sirio en su más absoluta soledad por parte de países que creyó eran sus aliados.
La voluntad de Assad de quedarse en el poder no esta fuerá de la realidad, este último tiempo recibió una gran ayuda por parte del gobierno ruso, logrando equipar muy bien al ejército sirio, lo que le estaría permitiendo a Assad hacer frente a sus opositores y volver a obtener la imagen del líder de su país. Ante esta nueva realidad, notaremos cómo se despertó de nuevo el interés de los países árabes por Siria.
Para empezar, a finales del 2018 el Presidente de Sudán Omar al-Bashir realizó una visita, que contó con una reunión junto al Presidente sirio Bashar Al-assad. Esta visita no recibió ninguna crítica negativa por parte de la prensa árabe, al contrario, los mismos medios de comunicación sirios publicaron que se estaría planificando renovar las relaciones entre estos dos países.
Ahora, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, espera ser el segundo líder árabe en visitar Damasco. Funcionarios de alto rango de Fatah dijeron que el presidente de la Autoridad Palestina estaría realizando su visita el próximo mes junto a una delegación palestina de alto rango. Las primeras conexiones ya se hicieron, a principios de esta semana, el miembro del Comité Ejecutivo de la OLP, Azzam al-Ahmad, visitó Damasco en nombre de Mahmoud Abbas e inauguró las oficinas oficiales de la televisión palestina en la capital siria.
Esto nos indica de principio que la Autoridad Palestina tiene la esperanza de que la concentración en el problema sirio se dirija hacia la cuestión palestina, podemos decir que este intento de renovar las relaciones bien podría ser una estrategia más para Abbas de también ser parte de la foto. Por otra parte, sería una victoria para la organización Fatah, que a través de la instalación de canales palestinos como principio de una futura próspera relación, deja en mal lugar a sus enemigos, que no tienen buenas relaciones con Assad. Entre Assad y Hamas las relaciones se enfriaron al comienzo de la guerra civil siria, cuando el líder de Hamas, Khaled Mashaal decidió trasladar la sede del movimiento terrorista de Damasco a Doha, Qatar, como muestra de su enemistad.
Por parte de Abbas, este estaría tratando de fortalecer su posición dentro del mundo árabe. Si el presidente Assad sufrió de aislamiento bien podría compartir este un interés común. El presidente de la Autoridad Palestina conoce muy bien los acontecimientos en el Medio Oriente, Irán trata de mediar entre Bashar Assad y el liderazgo de Hamas, y el presidente de la Autoridad Palestina quiere preceder a Hamas en este asunto. Él entiende que es solo una cuestión de tiempo hasta que la reconciliación entre Hamas y Damasco llegue a buen término.
No se sabe cómo estas podrían ayudar a Abbas, quien está recibiendo fuertes criticas por este nuevo acercamiento, ya que según la opinión del pueblo palestino, Assad es considerado un asesino que atentó incluso con armamento químico a sus propios civiles, pero esto no interesa a los gobernantes árabes que temen y respetan el poder sin importar acordar o no con el derramamiento de sangre realizado por Bashar Al-Assad.