Israel depende del Mar Mediterráneo, y la Marina de Israel tiene la responsabilidad general de salvaguardar los activos estratégicos, económicos y de seguridad del país en y alrededor de sus aguas territoriales. Por diversas razones históricas, a la Marina israelí no se le dio originalmente la prioridad otorgada a sus dos servicios hermanos: las fuerzas terrestres y aéreas,pero la situación cambió

Por: Dr. Eitan Shamir

Las tendencias geoestratégicas recientes han alterado la situación de seguridad en el Oriente Medio y el Mediterráneo oriental, lo que ha afectado la naturaleza de las amenazas a la seguridad nacional de Israel. Estos desarrollos han llevado a un papel cada vez más importante para la Marina israelí en la garantía de los intereses nacionales.

Israel está rodeado por tres lados: tiene países al norte, sur y este. Su independencia, economía y seguridad —de hecho, su propia existencia— depende del Mar Mediterráneo. La mitad de los residentes del país vive a menos de 30 kilómetros de la costa y más del 98% del comercio exterior de Israel se transporta por mar.

La Marina de Israel (MI) tiene la responsabilidad general de salvaguardar los activos estratégicos, de seguridad y económicos de Israel a lo largo de la costa y cerca de ella, así como más allá del mar en sus aguas territoriales y en su Zona Económica Exclusiva (ZEE). La MI también es responsable de proteger las rutas marítimas hacia y desde Israel, asegurar el transporte y el comercio marítimo, combatir el terrorismo marítimo y ayudar a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en combate. En este contexto, la Marina se involucra en operaciones especiales y operaciones de inteligencia. Cuando es necesario, también realiza ataques contra objetivos terrestres y marítimos.

Por varias razones históricas, a la MI no se le otorgó originalmente la misma prioridad que sus dos servicios hermanos: las fuerzas terrestres y la fuerza aérea (IAF), que se beneficiaron de inversiones relativas mucho mayores en términos de hombres y material. Los servicios terrestres y aéreos se consideraban el principal pilar de la defensa de Israel, mientras que el papel de la MI era poco más que el de un guardacostas fuerte. Durante décadas, la MI fue el hermano pequeño de sus dos hermanos y uno de los más pequeños del mundo (por el tamaño del país y su cercanía al mar).

A pesar de su inferioridad en tamaño y recursos (y posiblemente a causa de ello), la MI demostró ser innovadora en doctrina y tecnología. Fue la primera Marina que se basó completamente en barcos de misiles y la primera en ganar una batalla naval usándolos (contra barcos de misiles de fabricación rusa en 1973). A lo largo de su existencia, la MI ha introducido muchas innovaciones y ha adquirido una experiencia operativa considerable.

Marina israelí

Desde el comienzo del siglo 21, las tendencias geoestratégicas han alterado las condiciones de seguridad del Oriente Medio y el Mediterráneo oriental y afectado a los tipos de amenazas a las que se somete la seguridad nacional de Israel. Estos desarrollos llevaron a un papel más importante para la MI en la salvaguarda de los intereses nacionales de Israel, una evolución que llevó a un mayor énfasis en el desarrollo de la fuerza de la marina. 

Como resultado, la MI de hoy está equipada con sistemas avanzados de detección, comunicación, comando y control, guerra electrónica y armas. La Marina opera plataformas avanzadas (lanchas de misiles, fragatas, submarinos y aviones) y posee fuertes capacidades para construir una imagen marítima, recopilación de inteligencia y defensa aérea. La MI ahora puede proyectar energía a áreas más allá del Mediterráneo Oriental.

Las nuevas amenazas geoestratégicas que están impulsando el desarrollo de la fuerza marina y los cambios doctrinales se pueden dividir en cuatro categorías. El primero es la creciente capacidad de otras marinas de la región, en primer lugar la de Irán, pero también de países como Egipto y Turquía, que podrían volverse hostiles en determinados escenarios. El segundo tiene que ver con la reciente asignación de la MI de proteger los enormes depósitos de gas natural que se descubrieron en la zona económica de Israel. Estas plataformas están bajo la constante amenaza de ataques con misiles por parte de Hamas y Hezbollah. El tercero es la amenaza constante y cada vez mayor de bombardeos de ataques con misiles cada vez más precisos por parte de Irán y sus representantes en la región. La MI puede agregar profundidad estratégica a la masa terrestre limitada de Israel, y sus barcos de misiles y submarinos pueden proporcionar redundancia adicional y permitir capacidades mejoradas.

Por último, parte de la respuesta de Israel a algunos de estos desarrollos fue convertirse en parte de una alianza marítima emergente en el Mediterráneo Oriental, principalmente con Chipre y Grecia. Si Israel aspira a desempeñar un papel de liderazgo en la alianza, deberá mantener una marina relativamente grande y fuerte.

Fuente: Besa Center

Fecha de publicación: 01.11.20

Traducción: Gastón Saidman