La narrativa de la «resistencia» justifica una guerra infinita contra Israel
Por Seth J. Frantzman
El argumento de que los palestinos tienen el «derecho» de resistir y de que todo Israel está «ocupado», presenta un argumento para excusar y justificar una guerra sin fin contra Israel.
El objetivo de los recientes debates fuera de Israel sobre la guerra entre Israel y Hamas es tratar de pasar del debate sobre los cohetes de Hamas y los ataques aéreos israelíes, a una discusión sobre el «derecho a resistir» ante un territorio completo del actual Israel que es considerado «ocupado» por un Estado «colonizador». Este impulso narrativo ha sido diseñado y establecido entre los críticos occidentales de Israel y a través medios estatales como el canal TRT de Turquía, así como por políticos y medios de comunicación populares en inglés, árabe y otros idiomas.
Por ejemplo, The New Arab en Reino Unido publicó un artículo hablando de los enfrentamientos en «Haifa ocupada». Ese mismo artículo habla de los «criminales sionistas» y su «independencia», una aparente referencia al día de la independencia de Israel. El ascenso de la opinión de que todo Israel está «ocupado» y en la que se refiere a Israel como un estado «colonizador» e incluso se afirma que las turbas judías de extrema derecha son «supremacistas blancos judíos», es parte de una narrativa que retrata a todos los israelíes como extranjeros. En esta narrativa, a los árabes de ciudadanía israelí se les denomina «árabes del 48» como si el tiempo se hubiera detenido cuando Israel fue creado y esperasen el regreso a ese tiempo pasado en el que no se debería haber declarado la independencia de Israel.
Alexandría Ocasio-Cortez, miembro del Congreso de Estados Unidos, dijo en la Cámara de Representantes que el conflicto actual «no se trata de ambas partes. Se trata de un desequilibrio de poder… El presidente Biden declaró que Israel tiene derecho a la autodefensa… Pero, ¿tienen los palestinos derecho a sobrevivir?» ¿Para Ocasio-Cortez los cohetes de Hamas son «autodefensas»?
Otras discusiones sobre el actual conflicto han argumentado que Israel utiliza la “fuerza desproporcionada”. Otro miembro del Congreso norteamericano sugirió que los palestinos necesitan una defensa aérea suministrada por Estados Unidos. Junto con el argumento de que los palestinos tienen un «derecho» a resistir y que todo Israel está «ocupado», esto presenta una justificación para una guerra sin fin contra Israel excusada y justificada como una especie de derecho.
Una respuesta proporcionada significa, bajo esta perspectiva, que Hamas puede disparar cohetes cuando quiera y poner a millones de personas en refugios antibombas y no sufrir consecuencias reales. Por ejemplo, en los primeros días del reciente conflicto hubo controversia sobre Israel apuntando militarmente a edificios en Gaza. ¿Puede un militar atacar un edificio en el que haya posibilidad de haber civiles dentro o en las cercanías? De ese punto el argumento se trasladó a la posición de que Hamas tiene derecho a atacar ciudades israelíes debido a la presencia de algunos militares israelíes en las mismas. En resumen, en esta extraña lógica, Israel no puede atacar un edificio en Gaza, pero Hamas tiene derecho a disparar cohetes de “resistencia” indiscriminadamente contra todas las partes de Israel. Israel sólo debe dar una respuesta “proporcionada” a los cohetes, sea lo que esto signifique.
La lógica presentada aquí muestra un caso de guerra terrorista justificada sin fin contra Israel. Los cohetes son vistos como «resistencia» y los palestinos tienen el «derecho de resistir la ocupación», dicen algunas voces. Por ejemplo Susan Sarandon, la celebridad, publicó en las redes sociales algunos supuestos hechos sobre el conflicto. En la pregunta y respuesta, se plantea la cuestión de si hay un «conflicto» y la respuesta es que «lo que está sucediendo en Palestina es el colonialismo de los colonos, la ocupación militar, el robo de tierras y la limpieza étnica». Los palestinos están eternamente «colonizados» y «oprimidos» en la narración. Eso significa que no hay «conflicto» porque aparentemente cuando los misiles de fuego de los «oprimidos» contra las ciudades matan civiles es un método aceptable para combatir el «colonialismo».
Otro argumento a favor de esta narrativa se presenta de la siguiente manera: «Como los acontecimientos en Jerusalén Oriental ocupada israelí y Gaza han ilustrado, hoy en Palestina, ningún hogar es seguro, ninguna institución cívica es segura, ningún sitio sagrado, siempre y cuando la promesa de los derechos inalienables de los palestinos, incluido el derecho a regresar, siga sin cumplirse». Esto fue escrito en el sitio web de Medical Aid for Palestinians. Parecería significar que hasta que no se cumplan todas las reivindicaciones de los palestinos, incluido el “retorno” de millones de descendientes palestinos de los que huyeron de la guerra de 1948, entonces no puede haber paz. Una vez más, se trata de ajustar el reloj de nuevo a 1948.
Otra de las críticas formuladas en Estados Unidos es contra la ayuda militar a Israel, parte de un paquete a una década que supera los 3.000 millones al año. Este dinero se gasta principalmente en los mismos en productos de defensa de EE.UU.producidos en ese país. Sin embargo, los críticos dicen que debe terminarse o debe ser utilizado como palanca para lograr que Israel detenga sus ataques aéreos. Esto parece significar que, si bien Hamas puede disparar 2.500 cohetes contra Israel, como castigo por el disparo de cohetes de Hamas, Israel no debería recibir ayuda militar. En esta línea argumental no estaba claro si cuantos más cohetes de Hamas dispararan, más ayuda se debería reducir.
En resumen, los argumentos expuestos prevén y jusfitican un conflicto sin fin debido a que constantemente se enmarcan los ataques de cohetes por parte de Hamas como mera «resistencia».
Fuente: Jerusalem Post (traducción editada para su claridad en castellano)