La ONU define a Irak como el quinto país más vulnerable del mundo ante el cambio climático, ya que ha sido testigo de cantidades récord de lluvias escasas y altas temperaturas en los últimos años.
Fuente: JCPA
Irak presentó una solicitud a Turquía el 16 de julio para aumentar el flujo de agua río abajo a lo largo de los ríos Tigris y Éufrates, ya que ambos países enfrentan sequías y tensiones por la gestión de los recursos.
Bagdad se queja regularmente de que las represas construidas en los países vecinos afectan los niveles de sus ríos.
El ministro de Agua, Mehdi Al-Hamdani, y el representante especial del presidente turco en Irak, Visal Eroglu, discutieron las «cantidades de agua que llegan a Irak a través del Tigris y el Éufrates» desde Turquía, según un comunicado iraquí.
Hamdani pidió a Turquía en una videollamada «que examine nuevamente las cantidades de agua que se están liberando, para permitir que Irak supere la actual escasez de agua», agregó.
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Eroglu dijo que enviaría la solicitud a las autoridades del agua en Ankara «para aumentar la cantidad de agua liberada en los próximos días, de acuerdo con las reservas disponibles (de Turquía)», según el comunicado iraquí.
Las dos partes acordaron que una «delegación técnica» iraquí visitaría Turquía y permitiría «evaluar las reservas de la represa turca en el sitio».
Las Naciones Unidas definen a Irak como el quinto país más vulnerable del mundo al cambio climático, ya que ha sido testigo de una cantidad récord de lluvias escasas y altas temperaturas en los últimos años.
El tema de la gestión de los recursos hídricos ha aumentado las tensiones entre Bagdad y Ankara.
El 12 de julio, el embajador de Turquía en Irak, Ali Riza Goni, provocó indignación cuando acusó a los iraquíes de «desperdiciar» los recursos hídricos y pidió en Twitter «medidas inmediatas para reducir el desperdicio», incluida la «modernización de los sistemas de riego».
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Hamdani respondió que Ankara asume «el derecho a reducir la cuota de agua de Irak».
Irak ha visto tres años seguidos de sequía y ha reducido a la mitad las tierras agrícolas cultivadas para sus 42 millones de habitantes.
«Las reservas de agua han disminuido en un 60% en comparación con el año pasado”, manifestó un funcionario del gobierno, según informó la Agencia de Noticias Iraquí.
El nivel de agua proveniente del Tigris y el Éufrates era aproximadamente un tercio del promedio para el siglo pasado, según los datos.
Traducción: Gastón Saidman