En una amplia entrevista, el príncipe Al Faisal habla sobre la crisis energética, las relaciones con Estados Unidos y la gran crisis de confianza: “hay altibajos en las relaciones con Estados Unidos, ahora estamos en declive”, declaró.
Los saudíes se sienten decepcionados en un momento en que creen que EE. UU. y Arabia Saudita deberían estar juntos frente a las amenazas a la estabilidad y seguridad de la región del Golfo, expresó el príncipe al-Faisal, ex jefe de inteligencia de Arabia Saudita y ex embajador en Londres y Washington, a Arab.News.
Expresó que la mayor amenaza que plantea Irán en Yemen es afectar la seguridad y la estabilidad de las rutas de navegación en el Golfo y el Mar Rojo.
“El hecho de que el presidente Biden haya eliminado a los hutíes de la lista de terroristas los ha envalentonado y los ha vuelto aún más agresivos en sus ataques contra Arabia Saudita, así como contra los Emiratos Árabes Unidos”, dijo el príncipe.
“Siempre hemos tratado nuestra relación con Estados Unidos como estratégica”, manifestó cuando se le preguntó si muchos saudíes se sienten traicionados por uno de sus aliados más cercanos. El príncipe saudí enfatizó que la retirada de las fuerzas de defensa aérea de los ataques desde Yemen también generó desconfianza y decepción.
Presidente de los Estados Unidos Joe Biden
A primera vista, Washington parece bastante ansioso por mantener abiertos sus canales de comunicación con Riad a través de llamadas telefónicas y visitas de funcionarios, pero, según el príncipe, eso no es suficiente: «Este es el tono general de la atmósfera en Estados Unidos, por ejemplo, la declaración de los funcionarios estadounidenses que han declarado que apoyan a Arabia Saudita y ayudarán a Arabia Saudita a defenderse de la agresión externa, etc. Estamos agradecidos por estas declaraciones, pero necesitamos ver cosas más concretas en términos de la relación entre los dos liderazgos».
Se encogió de hombros ante la afirmación de que Arabia Saudita no se movió en el tema de los problemas petroleros que enfrenta Estados Unidos y argumentó que Washington mismo «es responsable de la situación en que se encuentra debido a su política energética».
«El presidente Biden ha establecido una política para que el gobierno de los Estados Unidos rompa todos los lazos con la llamada industria del petróleo y el gas. Ha reducido la producción de petróleo y la producción de gas en Estados Unidos (cuando) era, en los últimos años, el mayor productor de estas dos fuentes de energía», añadió al respecto.
Esta reducción en la producción energética de EE.UU., dice, ayudó a elevar los precios del petróleo, junto con el acuerdo de la OPEP+ alcanzado tras las dificultades del COVID-19, que ́fue un acuerdo para recortar la producción y estabilizar los precios, en beneficio de todos y la estabilidad del precio del petróleo´. »
El príncipe subrayó que Arabia Saudita no quiere ser «un instrumento o un motivo de inestabilidad en los precios del petróleo», señalando que acciones como el embargo de 1973 son cosa del pasado.
“Esta es la razón por la que el reino y otros miembros de la OPEP+ y la OPEP están cumpliendo con las cuotas de producción que se han asignado a sí mismos. Entiendo que la última decisión de la OPEP+ de aumentar gradualmente la producción de petróleo mientras el acuerdo está vigente es en respuesta a las dificultades por las que pasa la gente del sector energético. Otro factor que provoca las altas es la situación de seguridad, la guerra en Ucrania, más los recortes y sanciones de Europa y Estados Unidos a la industria petrolera rusa. Todas estas cosas se sumaron al alza de los precios del petróleo”.
Reunión de países miembros de la OPEP
En este contexto, el príncipe expresó su profundo descontento con las declaraciones hechas por la exsecretaria de Estado de EE.UU. Hillary Clinton en el programa «Meet the Press» de NBC en apoyo del enfoque «zanahoria y palo» para obligar a Arabia Saudita a aumentar su participación en la producción de petróleo, en el contexto de lo que denominó una «crisis existencial».
El príncipe ha dicho en repetidas ocasiones que no puede hablar en nombre de todos los saudíes: «No somos escolares a los que se deba tratar con palos y zanahorias. Somos un estado soberano, y cuando se nos trata de manera justa y directa, reaccionamos de manera similar. Es lamentable que estas sean las declaraciones de los políticos dondequiera que estén. Espero que la relación entre el Reino y Estados Unidos no dependa ni se construya sobre este principio».
El príncipe también desestimó la acusación de que Riad se había puesto del lado de Moscú en el conflicto de Ucrania y señaló que “el reino ha declarado públicamente y votado a favor de condenar la agresión contra Ucrania aprobada en la Asamblea General de la ONU”.
Al señalar que Arabia Saudita se había ofrecido a mediar entre Rusia y Ucrania, comentó: «Como mediadores, deberemos mantener el contacto y la capacidad de hablar con ambas partes. Hemos tenido buenas relaciones con ambos países a lo largo de los años. Recientemente, el reino donó a un fondo establecido por la ONU para brindar apoyo a los refugiados ucranianos en Europa. Así que ahí es donde se encuentra el reino».
Describió la propuesta de mediación saudita como «una propuesta de un amigo a amigos, tanto Ucrania como Rusia, con los que hemos tenido excelentes relaciones en el pasado reciente».
Fuente: JCPA – Edición
Traducción: Gastón Saidman