El Ministerio de Energía Israelí informó hoy que la delegación israelí para las conversaciones sobre el área económica del agua entre Israel y el Líbano, designada por el ministro de Energía, Dr. Yuval Steinitz, celebró su primera reunión con la delegación libanesa en la base de la FPNUL en Naqoura.

La delegación está compuesta por el ministro de Energía, Dr. Yuval Steinitz, el director general del Ministerio de Energía, Udi Adiri. Además, la delegación el general de brigada Dr. Oren Seter, jefe de la División Estratégica de las FDI, Reuven Ezer, asesor político del primer ministro, Alon Bar, jefe del Ministerio de Relaciones Exteriores, Mor Halutz, jefe de personal y Aviv Ayash, asesor político del ministro.

Entre Israel y el Líbano se terminaron los diálogos hace más de 30 años, pero las diferencias relacionadas a los derechos sobre las aguas económicas y su soberanía, entre otros conflictos, fue el más hablado desde que la zona en cuestión se volvió un rico yacimiento de gas natural, lo que forzó a las dos partes reunirse y por fin buscar una solución al problema, siendo este un beneficio económico para toda la región (Israel, Líbano, Chipre y Egipto e incluso Siria y Turquía), y que de seguro otorgará la seguridad que necesitan las empresas involucradas para comenzar sus inversiones que hasta ahora se abstuvieron por ser considerada una zona en conflicto.
El secretario de los Estados Unidos Pompeo llama a este proceso «marco conjunto para las discusiones marítimas»,  y manifestó que su país será el facilitador y mediador de las conversaciones.

El terreno es de unos 860 kilómetros cuadrados que se extiende sobre la zona fronteriza marítima en el Mediterráneo oriental, y se especula que las reservas potenciales aún no generadas en la cuenca del Levante ascienden a 1.700 millones de barriles de petróleo y 122 billones de pies cúbicos de gas (3.450 millones de metros cúbicos).

¿Cuál es el debate exactamente?

Para esto debemos entender las líneas en la zona que determinarán los bordes marítimos de estos dos países y el que exige cada uno. Israel prefiere planificar la frontera utilizando una etiqueta de línea en un ángulo simple de 90 grados cerca de la frontera terrestre y, por otro lado, el Líbano prefiere trazar el mapa de la frontera como una continuación directa de la frontera terrestre. Cada parte busca marcar su territorio en un marco que le dé más beneficios. Según un comunicado de la  Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar estipula que la demarcación debe ser «resultado de un acuerdo sobre el derecho internacional»  para lograr una solución justa. En ausencia de tal consentimiento, la demarcación debe hacerse sobre la base de la línea media entre puntos iguales a lo largo de las líneas de base de la costa.

El Ministerio de Energía Israelí durante la reunión de apertura informó que la reunión contó con la participación de los mediadores estadounidenses David Shenkar y John Dorscher, las partes dialogaron sobre los procesos y fijaron la agenda para las siguientes discusiones. Se espera que la próxima reunión tenga lugar en las próximas semanas.

Fecha: 15.10.20

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