Georgia: la sociedad civil pro Europa resiste
Estas protestas le dejan claro al gobierno y al mundo que la sociedad georgiana quiere adherirse a la Unión Europea, por eso se pueden ver muchas banderas de Georgia junto a las de la UE en las marchas y protestas
El pasado 16 de abril la Comisión Jurídica del Parlamento de Georgia respaldó el proyecto de ley «Sobre la transparencia de la influencia extranjera», conocido popularmente como la “Ley Rusa” propuesta por el gobierno. A pesar de las advertencias de la Unión Europea, El Departamento de Estado de EEUU y de las protestas sociales masivas contra esta legislación que limita y daña la libertad de acción de asociaciones civiles y ONGs, Georgia Dream, el partido gobernante ha declarado que no dará marcha atrás.
Mientras el gobierno georgiano continúa con su política de acercamiento a Moscú, la sociedad civil del país ha tomado las principales calles y avenidas de Tbilisi, la capital del país, Batumi y otras, en manifestaciones que aglutinan a miles de personas que entienden que la Ley Rusa perjudicará no sólo a las organizaciones de la sociedad civil sino también afectará el proceso georgiano hacia la Unión Europea.
Hay que decir que la ley propuesta también afectará a los medios de comunicación independientes del país y tendrá en efecto en la información política que recibirán los georgianos así como las capacidades de estas agencias independientes de visibilizar las injusticias y abusos del poder.
En ese contexto entrevistamos a Nino Dolidze, ciudadana georgiana y directora ejecutiva de International Society for Fair Elections and Democracy (ISFED)
Oriente Medio News.- Muchas gracias, Nino por platicar con nosotros. Cuéntanos un poco sobre tu biografía, carrera profesional y sobre ISFED.
Nino Dolidze.- Muchas gracias a ustedes. Soy Nino, soy georgiana trabajo para la International Society for Fair Elections and Democracy (ISFED) una organización no gubernamental que fue establecida en 1995 y que tiene como principal objetivo observar y analizar de manera imparcial y profesional procesos electorales y el trabajo de ONGs y organizaciones de la sociedad civil. En lo personal he trabajado en la observación y análisis de procesos electorales tanto en Georgia como en otros países por más de 15 años así que he estado apoyando y trabajado por el desarrollo y consolidación de la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho en Georgia así como la lucha contra la desinformación, propaganda y la inequidad de género en el país. A lo anterior sumaría que he participado como observadora electoral en más de 20 misiones en diferentes países.
OMN.- Platícanos un poco sobre el contexto nacional en el que se dan estas protestas. Es importante conocer más sobre la sociedad georgiana y sus aspiraciones democráticas.
ND.- Georgia es un país del Cáucaso del sur ubicado en el Mar Negro. Al ser una nación y un país pequeño Georgia ha estado amenazada por vecinos más poderosos a lo largo de la historia. Somos una nación cristiana muy antigua: Georgia, así como muchos países ex soviéticos, recuperó su independencia con el fin de la URSS a principios de los 90s. A pesar de esto hemos tenido guerras constantes contra Rusia tanto a inicios de nuestra independencia como en el 2008 por la cual el 20% del territorio georgiano internacionalmente reconocido está aún bajo ocupación rusa. Tenemos dos territorios ocupados, Abjasia y Tsjinvali (Osetia del Sur). Rusia es nuestro enemigo principal no sólo desde la época soviética sino desde el periodo zarista imperialista previo durante el cual hubo agresiones e intentos de anexión del territorio georgiano. De acuerdo con las encuestas la mayor parte de la población georgiana considera a Rusia la mayor amenaza para nuestro país y también la mayor parte de la sociedad georgiana apoya a Ucrania en su resistencia a la agresión rusa. Los georgianos consideramos la lucha ucraniana como nuestra lucha también porque sabemos lo que significa ser agredidos por Rusia. El mayor deseo de la sociedad georgiana es adherirse a la Unión Europea y sumarse a la OTAN pues nuestros socios estratégicos más importantes son Estados Unidos, Reino Unido y los países miembros de la UE.
OMN.- El actual gobierno georgiano ha mandando señales alarmantes sobre su acercamiento a Moscú y sus deseos de controlar a la sociedad civil. Platícanos al respecto.
ND.- Actualmente tenemos un partido mayoritario en el parlamento de Georgia llamado “Sueño Georgiano” que llegó al poder en 2012. Tendremos elecciones parlamentarias el próximo 26 de octubre. Si analizas la situación política y electoral del país verás que una mayor parte del electorado apoya a la oposición que es pro europea pero hemos tenido muchos problemas políticos en el país en los últimos años. Entre los problemas electorales que tenemos es la compra de votos, la intimidación a la oposición, el uso de los recursos públicos para financiar campañas del oficialismo, intentar controlar los medios de comunicación y limitar el trabajo de las asociaciones civiles críticas al gobierno. En nuestro sitio web pueden consultar los análisis que hemos realizado sobre elecciones previas. Lo anterior demuestra lo importante que resulta analizar cómo se realizan las elecciones y qué tan limpias son. Además del interés por las elecciones tenemos una propuesta de ley que ha despertado la preocupación de la sociedad civil georgiana
Esta propuesta de ley presentada por el partido en el poder afirma que todas las asociaciones civiles, medios de comunicación y ONGs que reciban más del 20% de sus recursos para operar del extranjero deben reducir ese porcentaje o ser catalogadas como “agencias extranjeras”. El mismo Ministerio del Interior ha declarado que esas organizaciones no representan el interés de Georgia sino de potencias extranjeras. Esta propuesta de legislación es muy problemática porque aquí en Georgia muchos países europeos ayudan a trabajar temas como el desarrollo de valores democráticos y la economía, el respeto a los DDHH así que es contrario a nuestra dignidad como sociedad civil que el gobierno pretenda limitar nuestro trabajo y nos quiera catalogar como “representantes del extranjero” cuando somos ciudadanos georgianos preocupados por nuestro país. Nuestros mayores donantes son otras organizaciones civiles de varios países europeos. Ser definidos como “agentes del extranjero” sería muy problemático para nuestro trabajo y es por eso que el gobierno quiere imponer esa ley, para limitar nuestra crítica a su desempeño. Este tipo de ley ya se introdujo en Rusia en 2012 (de ahí que se le llame la “Ley Rusa” acá en Georgia) y hemos visto cómo esa legislación ayudó en Rusia a silenciar organizaciones críticas a Putin y su gobierno. Es por eso que estamos resistiendo por más de 10 días a esta legislación perjudicial para la democracia georgiana.
OMN.- Hay precedentes a este intento del gobierno. El año pasado ya hubo protestas sociales. Cuéntanos sobre ellas.
ND.- Así es, ya el año pasado el gobierno georgiano intentó imponer este tipo de legislación. En marzo de 2023 hubo grandes protestas sociales contra esto, quizá en sus países vieron las imágenes de cómo los ciudadanos georgianos se opusieron. Tal fue el nivel de protesta y resistencia que el gobierno tuvo que retirar la propuesta de ley. Las protestas no se limitaron a Tbilisi sino también a otras ciudades como Batumi lo que le mostró al gobierno que estaba enfrentando una resistencia nacional. También ayudó a nuestra causa que muchos gobiernos europeos señalaron su preocupación de que se pretendiera imponer este tipo de legislación antidemocrática en un país como Georgia que aspira a ser parte de la Unión Europea.
OMN.- Tbilisi es el epicentro de las protestas pero hay otras ciudades que se han sumado.
ND.- Sí, la protesta social se ha extendido más allá de la capital. Batumi y otras ciudades ha habido protestas. En los territorios ocupados por Rusia no se han registrado protestas debido al control que tiene Rusia ahí. Hay que destacar que la gente se ha autoorganizado para las protestas. Cada día la gente sale a las calles a protestar. Se ven muchos estudiantes y jóvenes en las protestas pero también gente mayor, profesores, intelectuales, artistas. Los jugadores de la selección de fútbol que lograron la calificación a la Eurocopa de este año también han apoyado las manifestaciones sociales que ya se extienden por 10 días. La gente se presenta diariamente en frente del ministerio de justicia, del parlamento mismo para que se desestime esta propuesta de ley. La gente ha dicho que mantendrá la protesta hasta que la ley sea retirada.
Quiero dejar en claro que en Georgia ya existe una legislación amplia para la transparencia y el manejo de los recursos de las asociaciones civiles y ONGs. Todos los fondos y la información que manejamos están disponible para ser en cualquier momento fiscalizada así que el pretexto del gobierno de buscar la transparencia no tiene fundamento porque ya tenemos legislación al respecto en Georgia y porque nuestros donantes en Europa y Estados Unidos así lo exigen. Lo que realmente busca el gobierno con esta ley es catalogar a todo el activismo civil y a todas las organizaciones que no dependen del gobierno como agentes extranjeros lo que desvirtuaría nuestro trabajo de cara a la sociedad georgiana que es para la que trabajamos.
Lo que hay ahora es una resistencia a la propuesta de ley, demostrarle al gobierno que es contraproducente para ellos continuar proponiendo este tipo de leyes. Estas protestas también le dejan claro al gobierno y al mundo que la sociedad georgiana quiere adherirse a la Unión Europea, por eso puedes ver muchas banderas de Georgia junto a las de la UE en las marchas y protestas. Si el partido en el gobierno continúa con sus intentos de afectar la democracia en el país dañará nuestra política exterior así que los efectos no son sólo locales sino internacionales. Nuestra propia constitución sostiene que se deben hacer todos los esfuerzos para que el país se integre a Europa. Desde ese punto la Ley Rusa es anticonstitucional