Como todos sabemos el nuevo gobierno de Israel logró hacer orden en el presupuesto estatal, el que fue aprobado en su primera lectura. Esto representa de alguna manera la estabilidad de esta coalición que logra aclarar uno de los debates que más tiempo mantuvo confundido al gobierno como a sus ciudadanos, pero la última temporada de labor parlamentaria parece poner fin al desorden.
El objetivo de la ley es enmendar varias leyes y establecer disposiciones adicionales con el fin de elevar el nivel de vida en el país, fortalecer el crecimiento económico, incluido el crecimiento per cápita, aumentar el empleo, la productividad en la economía y el nivel de competencia en ella, bajar el costo de vida en y reducir la carga regulatoria, todo de acuerdo con los objetivos presupuestarios y la política económica para el 2021 y 2022.
Durante la discusión en el pleno, como era de esperar, la oposición expresó su desacuerdo con la propuesta, y si nos fijamos bien podemos notar que la brecha entre los opositores y quienes votaron a favor no fue muy extensa, 59 a favor y 54 en contra. Estos datos nos demuestran que si bien se puso fin al problema presupuestario, como sociedad debemos tener en cuenta que hubo una mayoría que se opuso y queremos saber la razón.
Un resumen de cómo se llevó el diálogo durante la sesión plenaria:
El Diputado Yuli Edelstein
Según el ministro de Finanzas, Avigdor Liberman, lo sucedido representa el regreso a la normalidad, y manifestó que se está hablando del presupuesto mejor enfocado para la sociedad israelí, a lo que el Diputado Yuli Edelstein (Likud) exigió a modo de pregunta que se detalle más el tema: «¿Cuál es la conexión entre las propuestas presentadas aquí y el presupuesto estatal?»
El Ministro Liberman asegura que el logro es positivo ya que llegó bajo circunstancias muy difíciles que ahora comenzarán a cambiar. El gobierno actual debió buscar soluciones en medio de una crisis económica en la cual Israel llegó a un déficit sin precedentes, el 11,6%, uno de los más altos del mundo. Sin embargo se puede decir que el mercado israelí se está recuperando de a poco con cierta sensación positiva, la economía volvió en marzo a su actividad y, según los parámetros más objetivos, se ve un buen desarrollo en el mercado. La recaudación del impuesto sobre la renta en julio también superó las expectativas y en el presupuesto acordado se logró sumar una adición a todos los ministerios sociales.
Liberman aclaró también que la decisión de cancelar parte de los pagos a los desempleados fue la decisión más difícil, pero que hay que entender que ese proceso ahorró al país unos 800 millones de shekels.
El Diputado Ofer Kasif
Las críticas no tardaron en llegar y hubieron diputados que cuestionaron el presupuesto y obviamente el liderazgo actual, como lo hizo el Diputado Ofer Kasif (Hadash), quien calificó al nuevo gobierno como un gobierno de cambios políticos y no de cambios sociales. Expresó lo siguiente: «¿Es esto un cambio de gobierno? Este es un gobierno de nombramientos, uno cuya existencia entera se basa en nombramientos y puestos de trabajo. ¿Citas para qué? ¿En beneficio de la justicia social? ¿Por el bien de la igualdad? ¿Por el bien de poner fin a la ocupación y el apartheid y lograr una paz justa? No, y no y no. El gobierno actual se ha convertido en un medio para lograr los objetivos de un demagogo y un delincuente fugitivo, por lo que el presupuesto y la ley de arreglos antidemocráticos que lo acompañan se han convertido en nada más que herramientas para preservar la condición de extrema derecha.»
El Diputado Yinon Azulai (Shas) se dirigió al Ministro de Finanzas a modo de burla en su participación durante la reunión, calificándolo a Liberman como un desaparecido durante los últimos tres meses, preguntándole a su vez con qué derechos llega aquí hoy con decretos en contra de los débiles, decretos que están en contra de la gente con problemas económicos, y «contándonos historias».
El Diputado Yisrael Eichler
El Diputado Yisrael Eichler (Yahadut Hatorah) expresó su decepción de la siguiente manera: «Este es el gobierno más sectorial desde el establecimiento del Estado de Israel. Está compuesto por varias secciones, y hace una selección entre los diferentes sectores. La mayoría de los decretos de la Ley de Arreglos están dirigidos contra el sector ultraortodoxo, contra las familias enteras que usan utensilios desechables, contra las madres ultraortodoxas, contra los presupuestos de educación de los niños «.
Si bien todos cantan victoria por el nuevo presupuesto, la oposición ante este es muy fuerte y puede ser que acarree problemas. El acuerdo consumado debilita a la oposición quien no se detendrá hasta encontrar la manera de sabotear toda actividad que el gobierno logre llevar a cabo. Israel se enfrenta a una realidad nunca vivida antes bajo un gobierno que todavía no transmite la seguridad ante los ojos de sus civiles. Vamos a tener que estar muy atentos al modo que se comportarán las dos partes del Parlamento. La sociedad israelí espera que todo proceso político no logre desestabilizar más la situación, debemos esperar a las próximas semanas o meses para ver como el presupuesto influenciará en la economía del país. Solo entonces se podrá juzgar.